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Animales en peligro

“Apadrina una churra”, el lema de la Diputación de Sevilla para recuperar a una oveja en peligro de extinción

Solo quedan 500 ejemplares, la mitad que el lince ibérico, considerado una especie amenazada. Con una población estimada en poco más de 500 ejemplares, esta especie cuenta con menos individuos que el lince ibérico, cuya población supera los mil en la Península.

“Apadrina una churra”, el lema de la Diputación de Sevilla para recuperar a una oveja en peligro de extinción

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Dicen que contando ovejas se puede alcanzar el sueño. Pero quizá no dé lo suficiente si se trata de una oveja autóctona muy especial. En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra hoy 5 de junio, la Diputación de Sevilla ha centrado su atención en la oveja Churra Lebrijana, también conocida como Marismeña, una raza autóctona andaluza al borde de la desaparición. Con una población estimada en poco más de 500 ejemplares, esta especie cuenta con menos individuos que el lince ibérico, cuya población supera los mil en la Península.

Durante la jornada de puertas abiertas organizada por la institución provincial, los asistentes pudieron conocer de cerca a varios ejemplares de esta raza, procedentes de la finca Monte San Antonio, gestionada por la Diputación. Los pastores responsables compartieron detalles sobre el programa de recuperación genética y reproductiva que se puso en marcha tras localizar los últimos 20 ejemplares supervivientes de la raza, consolidando así una labor de conservación pionera en el ámbito ganadero andaluz.

Cómo apadrinarla

Como parte de esta apuesta por la visibilidad y la sensibilización, se ha lanzado la campaña “Apadrina una Churra”, que permite a los ciudadanos conocer, amadrinar o apadrinar simbólicamente a una de estas ovejas a través de la web oficial de la Diputación. Los participantes reciben un certificado nominativo y contribuyen a la difusión del valor cultural y ambiental de esta raza autóctona.

La Churra Lebrijana se adaptó a las duras condiciones de la marisma de Doñana, pero sus bajos rendimientos económicos la hicieron inviable, situándola al borde de la extinción. Su población se estima en poco más de medio millar de ejemplares, la mitad de los cuales se conservan en Doñana, en la marisma de Hinojos (Huelva), y la otra mitad en la Sierra Norte de Sevilla gracias a un programa de la Diputación Provincial de Sevilla.

Además de la exposición ganadera, la jornada incluyó el reparto de plantones de encinas y alcornoques procedentes del vivero del Monte San Antonio, microcharlas temáticas conducidas por el divulgador medioambiental Lucas Melcón ‘Malacara’, y actividades educativas como un escape room sobre emergencia climática para alumnado de Secundaria.

Una especie nuestra

La Diputación ha querido destacar en esta edición de 2025 no solo su apoyo al lema global de este año, “Sin contaminación por plásticos”, sino también su compromiso sostenido con la acción local como herramienta de preservación del medio ambiente. El objetivo es que la Churra Lebrijana se convierte en símbolo de biodiversidad, sostenibilidad y arraigo rural.

Apadrinar una Churra no es solo un gesto simbólico, sino un acto de defensa activa de un legado natural que, con apoyo ciudadano e institucional, puede volver a florecer.

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