ES VIRAL
La ensaladilla rusa con guanciale que arrasa en redes: cremosa, sabrosa y con un toque crujiente
La ensaladilla rusa con guanciale que ha compartido Alfredo Vozmediano se ha hecho viral por su sabor explosivo, su textura cremosa y el toque crujiente del guanciale. Una receta fácil, original y perfecta para sorprender este verano.
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La ensaladilla rusa es uno de esos platos que todos hemos comido mil veces, pero cuando cae en manos de un cocinillas con talento, puede transformarse en algo totalmente nuevo. Y eso es justo lo que ha hecho Alfredo Vozmediano, creador de contenido de cocina, con su ensaladilla con guanciale, una versión que se ha hecho viral por su sabor, su textura y su originalidad.
En su cuenta de Instagram, Alfredo compartió el paso a paso de esta receta que combina lo mejor de la cocina tradicional con técnicas y sabores gourmet. ¿El resultado? Una explosión de sabor que ya muchos quieren replicar en casa. Aquí te contamos cómo hacerla.
Ingredientes
Lo primero que llama la atención es el guanciale, un embutido italiano similar al bacon, pero mucho más sabroso, que se vuelve crujiente al cocinarlo y aporta un contraste brutal con la cremosidad de la mezcla.
Estos son todos los ingredientes que necesitas:
- 2 patatas
- 3 zanahorias
- 100 g de guanciale
- 200 ml de mayonesa
- 1 cucharadita de mostaza
- 1 cucharada de pepinillo picado
- 3 yemas de huevo
- 100 ml de salsa de soja
- 2 cucharadas del poso de mantequilla tostada
Paso a paso
1. Cuece las patatas y las zanahorias como en una ensaladilla de toda la vida. Después, machácalas para que queden bien integradas y reserva.
2. Corta el guanciale en dados y cocínalo hasta que esté muy crujiente. Cuélalo y guarda la grasa que suelta. Seca los trozos con papel absorbente y pícalos bien finos.
3. En un bol, monta una mayonesa casera usando parte de la grasa del guanciale como base. A esta mezcla añade los trozos picados de guanciale, la mostaza y los pepinillos. El contraste entre lo salado, lo graso y lo ácido es espectacular.
4. Añade esta mayonesa a la base de patata y zanahoria y remueve hasta obtener una textura untuosa y homogénea. Aquí ya empieza a oler que alimenta.
El toque final que marca la diferencia
Lo más sorprendente de esta receta llega al final: Alfredo cura unas yemas de huevo en salsa de soja durante un par de horas. Cuando cogen textura, las emulsiona con mantequilla tostada, dando lugar a una salsa melosa y llena de sabor que se usa para decorar el plato.
Termina el emplatado con esa emulsión por encima, algunos trocitos de guanciale crujiente que hayan sobrado y… listo. Aquí tienes una ensaladilla gourmet, con personalidad y que puedes preparar en casa si quieres sorprender. Cremosa, sabrosa, con contrastes potentes y un crujiente que lo cambia todo. Ya no mirarás igual a la ensaladilla de toda la vida.
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